Eres tú, todo lo que quiero

Aquí, aquí me encuentro hoy después de mucho tiempo plasmando en las letras todo aquello que cada día,desde hace unos meses, maravillosos por cierto, he venido sintiendo.
Me estremece hasta extremos inimaginables pensarle, me paso las horas, los minutos, los segundos, pensándole, él se ha convertido en mis ideas, en mis ganas, en mi amor, en mis sonrisas y en mis mejores miradas. No me cansaría nunca de mirarle, quiero sabérmelo de memoria. Es él lo único que me levanta con una sonrisa del más frío suelo, es el el único con el poder de hacerme subir, de hacerme bajar. No sé, no sé ni lo que daría porque nunca jamás le faltase esa sonrisa tan infinita, esa sonrisa que al hacerse me hace tan infinita, Dios, que grande me hace.Yo , que quiero ser sus horas infinitas, y no dejarle nunca. Un escalofrío me recorre cuando escribo estas palabras, qué grande es y que grande me hace este sentimiento. Yo le quiero como nunca a nadie, le quiero a muerte, hasta extremos, infinitamente. Quizás nunca lo he dicho, me he dedicado pues a decírselo a él, a demostrárselo a cada hora, porque le quiero conmigo sin más, le quiero conmigo y nunca le voy a dejar escapar. De el me gusta cada detalle, cada instante, le quiero con sus más y sus menos, con sus ganas y sus sonrisas, le quiero con cada gesto, con sus miles de miradas y con su olor. Yo, que sé que por más baches que haya en el camino no se irá, y no me iré, yo que sé que quiero con el todos mis días, que sé que le quiero a muerte, que quiero estar con él hasta que todo se acabe, yo que con él lo quiero TODO...  Yo, que he valorado cada detalle, porque en verdad es lo que más cuenta, yo que he querido y quiero estar aquí a pie de cañón, yo, que le siento imprescindible... Tenemos pendientes amaneceres, atardeceres, noches y días, tenemos todo por delante, todo y nada, todo con él, nada sin. le quiero en mi vida desde el primer día, y cada día que pasa, le quiero más. Se me hacen eternos los días sin sus abrazos, pero lo que siento lo resiste todo, es invencible, increíble, como somos juntos. Le tengo guardados abrazos que abarcan ciudades, abrazos largos y grandes, de esos que no te dejan vivir más que en ese instante, y amarlo. Le tengo guardados besos gigantes, como él, besos, millones, besos que dan la vuelta a mi alma como si de fuego se tratase, amor. Me voy a dedicar a ser su abrigo cuando me lo pida, y cuando no también, voy a ser guardiana de su tiempo, y a amarlo como si me fuese la vida en ello.