martes, 19 de febrero de 2013

BE STRONG.

Fuerza. ¿Tu cómo definirías esa palabra? Yo, ahora mismo, al decirme a mi misma que me rindo, que me dejo caer, yo, me acabo de llamar a mi misma suma gilipollas. Y con sumo gusto. ¿Dónde se ha visto que yo me haya rendido alguna vez? No señor. Yo siempre he luchado sin límites, yo siempre doy todo de mi y todo lo mejor. También puedo dar lo peor, pero eso me lo reservo para los peores. No, qué me voy a rendir, me siento estúpida por haber llegado a pensar que yo podría rendirme conmigo misma. Yo tengo fuerza para dar,regalar y compartir. Yo me quiero a mi misma y yo voy por delante de todo. Simplemente por el hecho de que si yo me pierdo, dejo de encontrar a los demás. Yo no puedo abandonarme a mi suerte. Sé que a veces puede ser muy duro, y muy jodido, pero siempre habrá cosas peores. Es tiempo de sonreír como siempre. Malos días y malas rachas tenemos todos. Trás la tormenta siempre viene la calma, ¿Recuerdas? A veces hay que llegar al fondo, tocar el suelo, ser consciente y joderte, para después volver a subir. Cada vez que caemos, cuando después llega la hora de levantarnos y seguir, lo hacemos con más fuerza, somos así. Sin embargo las ganas están en uno mismo, dependen de la atención que queramos prestarle. Pero si algo tengo claro es que los problemas se solucionan, que nada dura para siempre, ni lo bueno ni lo malo, en este caso, lo importante en estas situaciones es no acostumbrarse. Nunca te acostumbres a nada. Un día alguien jodidamente importante me dio ese mismo consejo, y cada vez que me estoy acostumbrando a algo me doy cuenta de que las costumbres y las rutinas no son buenas. Y le doy las gracias porque es y será uno de mejores consejos que me han dado en estos casi dieciocho años. Me ha servido de tanto que no sé qué habría hecho yo conmigo sin él. Yo confío en mi cada día, yo he aprendido a quererme cada día, he aprendido a seguir adelante y mantener la calma. He aprendido a luchar por lo que quiero y crearme ilusión cuando algo aquí dentro falla. Soy una persona que necesita las jodidas motivaciones para vivir como necesita el aire para respirar. Mi circuito se compone de miles de cables, y como los de todas las personas, muchas veces se cruzan. He aprendido a jugar con ellos de tal manera que hago enlaces imperfectamente perfectos y consigo sentirme realmente bien, por eso sé que nunca es la hora de abandonar. Porque yo siempre puedo y puedo con todo. Todo el mundo puede y yo no tenía que venir a ser la excepción que confirma la regla. Hoy he escuchado por ahí que la vida no tiene sentido si no tienes a alguien que te quiera y a alguien que te duela. Y es cierto, si nada nos doliese seríamos máquinas sin corazón,sin capacidad para empatizar, y hay más piedras que camino, pero lo prefiero así,prefiero un mundo jodidamente imperfecto, y hacerlo perfecto con todo ese amor que llevamos dentro. Ahora es el momento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario