Aquí la diferencia se establece cuando tu quieres establecerla. La diferencia se hace cuando sonríes, y haces que el mundo entero te de igual. Cuando haces que no te importe lo más mínimo si esta noche el mundo habla, o se calla. Porque no importa, no importa. Sólo importa tener esa sonrisa y hacerla permanente, y apretar los dientes, sonreír y siempre seguir. Uno llega lejos cuando no empieza la casa por el tejado, y ese es el defecto de muchos, empezar la casa por el tejado. Sin embargo, se trata de creer, y de ver y de sentir, de ver por donde comenzar,
y jamás anticipar un final. Porque si tu sonríes, el resto del mundo se para, y no por mi, si no porque me uno a la lista de gente que sonríe, y en este instante, sonrío, sonrío porque el resto no importa, porque en mi mundo mando yo..
Porque hoy se fueron los miedos y se despejaron las dudas. Porque todo se acabó. Al fin, al fin las cosas son como deben ser. De nuevo voy subiendo y no tengo miedo a bajar la vista y ver si el suelo está lejos, porque prefiero el cielo.
Porque como alguien importante me dijo,
La vida está hecha para los fuertes.
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